DUDAS SOBRE EL CANNABIDIOL: ¡LAS RESOLVEMOS!

dudas sobre el cannabidiol

Pese a que cada hay más usuarios de las cremas y productos con CDB, todavía son muchas las dudas sobre el cannabidiol que tiene la mayor parte de la población. Como expertos en su utilización, desde Atopyk nos gustaría resolver las más importantes para que puedas entender todas sus ventajas y por qué es una solución muy a tener en cuenta para toda clase de problemas de la piel.

No es la primera vez que utilizamos nuestro post para hablarte más en profundidad de este componente. En un post anterior, no hace mucho, ya os aportamos algunos datos sobre el CBD que quizá no conozcas y que consideramos realmente importantes. Pásate por esta entrada para descubrirlos. Estamos seguros que te van a ser de gran utilidad.

Resolvemos las principales dudas sobre el cannabidiol

  1. ¿Qué es el CBD?
    El CBD o cannabidiol es uno de los más de 100 cannabinoides que encontramos en la planta cáñamo. Es el segundo con mayor porcentaje de presencia y uno de los más demandados y estudiados a lo largo de los años. Posee una amplia cartera de propiedades relajantes y antiinflamatorias. Por eso, atrae la mirada de usuarios e investigadores.
  2. ¿Es legal proviniendo del cáñamo?
    Esta es, sin lugar a dudas, una de las principales dudas sobre el cannabidiol. El CBD es legal en España y en muchísimos países de nuestro entorno europeo, como Dinamarca, Francia, Noruega o Italia.
  3. ¿Cada cuanto debo utilizar cremas con CBD?
    El modo de aplicación también difiere dependiendo del producto que estemos utilizando. La dosis estándar es repartir la aplicación 8 horas, por lo que estaríamos hablando de tres diarias.
  4. ¿Cómo se usa el CBD?
    Nos lo podemos encontrar en diferentes formatos. Los más habituales son en cremas y en aceites, que podremos utilizarlo con un cuentagotas o con spray, dependiendo del producto.
  5. La última de las dudas sobre el cannabidiol: ¿Dónde lo guardo?
    Estamos hablando de un producto natural. Por lo tanto, el paso del tiempo puede afectarle si no lo conservamos de manera correcta. Hay que apartarlo del calor y de la exposición a la luz solar directa. Lo mejor será un lugar seco, oscuro y fresco, como ocurriría con cualquier medicamente que tuviéramos en casa.